Nunca jueguen con fuego, se van a quemar...
A pesar de todo lo que sucedió, a pesar de la frialdad
con la que suelo hablar ahora de lo que pasó, y de estar segura que no quiero
volverme a topar contigo jamás, te amé muchísimo, de eso no puede caber duda.
Amé, para expresarlo mejor, al personaje que representaste durante algún
tiempo. Estoy segura de que me leerás,
estoy segura de que no me vas a olvidar nunca y me encantará que en algún
momento de tu vida puedas asimilar esto, y quizás ya, con mejor suerte, seas
capaz de encontrarle sentido y darte cuenta por fin, de todo lo que destruiste.
Como decreto te digo lo siguiente: Definitivamente no soy la mujer que por haberte
amado te desea lo mejor…No. De hecho lo que espero es que la vida te de lo que
mereces, que en mi opinión y bajo mi perspectiva, no es precisamente algo bueno.
Deseo que la vida te colme de lecciones y duros aprendizajes; no deseo que la
siguiente mujer que se cruce en tu camino sea la que disfrute los beneficios de
lo aprendido. Deseo más bien, que ya no vuelvas a lastimar a nadie, y que en tu
profunda y absoluta soledad, seas capaz de reflexionar todo lo que te llevó al
punto de aislamiento que ahora te pueda hacer ver más claramente cómo es que
has sido una persona completamente insatisfecha, que en su afán por saciar su
sed y su hambre, no ha sabido degustar ni disfrutar cada placer y gozo que la
vida le ha otorgado.
“Sé que la amas, si no lo hicieras,
no estarías con ella. Pero sé que eres humano y tienes emociones variables, es
probable que la ames de formas incorrectas.
Una relación feliz y saludable puede
transformarse en una destructiva si no la tratas como merece ser tratada.
Sin embargo, espero que intentes
amarla adecuadamente. Espero que seas consciente de tu amor por ella. Espero
que sepas que esa conciencia es lo que mantendrá fuerte tu relación.
Quiero que recuerdes cómo lucía la
primera vez que la viste. Ella era todo lo que habías deseado. Pero en su
belleza, su naturaleza, su sentido del humor o su independencia, hay algo que
no habías encontrado en nadie más.
Lo que más te sorprendió fue su
entereza.
Si la amas, mantenla de esa forma:
Mantén su belleza, su bravura; mantenla completa.
Aunque ella es artífice de su propio
destino, deseo que entiendas que juegas un papel muy importante en su vida. Como
la tratas determina cómo se ve a sí misma, puedes hacerla brillar o hacer que
se pierda. Ella es una estatua en tus manos y solo espera ser tratada con
cuidado.
La destruyes en el momento que
piensas conocerla. No es un libro que terminarás de leer tarde o temprano. Ella
es algo aún por descubrir, así que vive cada día como si fuera la primera vez
que la ves.
Estimula sus pensamientos, sus emociones,
su ser. Navega en su alma como si lo hicieras en el inmenso océano.
La destruirás si ella alguna vez
siente que la necesitas más de lo que la quieres. Destruirás cada centímetro de
su ser si sólo la amas cuando la soledad te inunda.
Su amor y existencia sanarán cada
parte de ti. Pero si estás con ella sólo para llenar el vacío de tu propia alma,
ella se dará cuenta, y la destruirás.
Y recuerda, ella tampoco desea ser
reparada. Quizá se abrió contigo y te contó sobre el dolor de su pasado; quizá
sabes el número exacto de piezas en que alguna vez se rompió, pero ella no te
lo dijo para que la armaras de nuevo, solo lo hizo para que sepas que fue capaz
de soportarlo y cómo eso la llevó a ser quien es hoy.
Quiere que sepas que la forma en que
la trates, con amor, entendimiento y paciencia, es lo que importa.
No la trates como si estuviera rota,
está completa con todas sus piezas, aún cuando esté llena de cicatrices y
marcas; abrázalas con ella, no le agregues más. Haz que vea el porqué de haber
pasado por relaciones destructivas, haz que vea que ya pasó lo "peor"
y de esa forma apreciará lo "mejor" que eres tú.
Si la amas, hazlo con todos sus
defectos e inseguridades; es tan imperfecta como tú y solo espera compartir esa
imperfección contigo.
Si la amas, hazla más fuerte, que
ella hará lo mismo contigo. Cualquier esfuerzo que tú hagas, ella lo hará al
doble.
Si la tratas bien, ella te amará aún
más.
Si la amas bien, nunca te olvidará.”
Con este texto, que casualmente encontré, quisiera que
alguna vez fueras capaz de comprender cómo se siente una mujer realmente
enamorada; juegas con fuego cada vez que mientes e ilusionas con el fin de
llenar un espacio que sabes bien que en tu caso, es imposible de llenar. El
vacío está en ti, no permitas que otra persona arrastre con la carga que
únicamente a ti te corresponde. Hoy lo que deseo fervientemente, para mi y para
todas aquellas a quienes has arrancado un pedazo de su vida, tiempo y alma, es
poder conocer a esa persona que no eras tú, pero que falsamente nos mostraste,
para experimentar esa complicidad que somos capaces de generar. Que toda la
destrucción que llevas a tu paso sea justamente lo que permita construir un futuro
sólido con relaciones positivas de toda índole: profesional, amistosa,
sentimental. En fin, repito, que la vida le brinde a cada quien, lo que merece.
Si hoy decido perdonarte no es por ti, ni para ti, es por encontrar de nuevo la paz
dentro de mi.